María José Duré, propietaria de la constructora que denunció al diputado Orlando Arévalo y su esposa, no acudió a la citación en la Fiscalía de Lambaré.
La denuncia apunta a que la pareja utilizó su influencia para evitar pagar una millonaria deuda por la construcción de su vivienda, que incluía exigencias como un inodoro inteligente de G. 13 millones y modificaciones en la entrada.